El elefante asiático Koshik, se une a otros animales como NOC, la ballena que imita la voz humana, la investigación que involucra a este elefante descubrió que era capaz de pronunciar palabras en coreano, las dice gracias a que mete la trompa en su boca.
Este animal va más allá, ya que aparte de hacer sonidos muy parecidos a la voz del ser humano, también pronuncia una serie de palabras. Su vocabulario es de cinco términos: "annyong" (hola), "anja" (sientate), "aniya" (no), "nuo" (túmbate), and "choah" (bien).
"La voz humana se basa principalmente en dos aspectos: tono y timbre" explica Angela Stoeger de la Universidad de Viena. "Sorprendentemente, Koshik es capaz de desarrollar ambos, tanto el timbre como el tono humano. Puede imitar a sus propios entrenadores, algo muy destacable en un animal con tantas diferencias con el hombre como el elefante", destaca.
Otro aspecto llamativo del paquidermo 'parlante' es su uso de la trompa para imitar la voz humana. Su larga laringe produce sonidos de tono muy grave, por lo que Koshik hace una copia exacta del tono y otras características de la voz de sus entrenadores.
"Pensamos que Koshik empezó a adaptar su vocalización a los seres humanos con los que convivía para fortalecer su afiliación social, algo que se ha observado en otras especies", concluye Angela Stoeger.
Este animal va más allá, ya que aparte de hacer sonidos muy parecidos a la voz del ser humano, también pronuncia una serie de palabras. Su vocabulario es de cinco términos: "annyong" (hola), "anja" (sientate), "aniya" (no), "nuo" (túmbate), and "choah" (bien).
"La voz humana se basa principalmente en dos aspectos: tono y timbre" explica Angela Stoeger de la Universidad de Viena. "Sorprendentemente, Koshik es capaz de desarrollar ambos, tanto el timbre como el tono humano. Puede imitar a sus propios entrenadores, algo muy destacable en un animal con tantas diferencias con el hombre como el elefante", destaca.
Otro aspecto llamativo del paquidermo 'parlante' es su uso de la trompa para imitar la voz humana. Su larga laringe produce sonidos de tono muy grave, por lo que Koshik hace una copia exacta del tono y otras características de la voz de sus entrenadores.
"Pensamos que Koshik empezó a adaptar su vocalización a los seres humanos con los que convivía para fortalecer su afiliación social, algo que se ha observado en otras especies", concluye Angela Stoeger.
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